22 de abril de 2021

La oferta de servicios públicos y la disposición a pagar tributos

Desde hace algún tiempo, vienen lanzándose globos sonda a fin de calibrar la receptividad de la población a abonar tasas por el uso de las autovías. Según informaciones recogidas recientemente por los medios de comunicación, la propuesta está ya bastante madura para llevarla a efecto. Así, en el proyecto –no público- del Plan de Recuperación, Transformación y Resiliencia remitido por el Gobierno de la nación a la Comisión Europea se recoge expresamente esa medida: “Es preciso desarrollar un sistema de pago por uso de la red de vías de alta capacidad que permita cubrir los costes de mantenimiento e integrar las externalidades negativas del transporte por carretera” [1].

Como tantas otras veces, nos encontramos con una situación en la que se plantea alcanzar más de un objetivo, presuntamente, con un solo instrumento, que, por lo demás, vendría a sumarse a otros con propósitos compartidos en distintos grado (impuesto sobre la matriculación de vehículos, impuesto sobre la circulación de vehículos, impuestos sobre carburantes)[2]. Dejando al margen estas consideraciones, la aparición de una carga pública vinculada al uso de un servicio público con la finalidad, entre otros aspectos, de mejorar la oferta de dicho servicio es una buena oportunidad para evaluar la disposición de los ciudadanos a efectuar contribuciones públicas.

A este respecto, es bastante frecuente escuchar que, aunque pueda existir alguna reticencia de determinados colectivos a hacer frente a sus obligaciones tributarias, en realidad existe una buena predisposición a aceptar subidas impositivas siempre que ello permita ampliar la oferta y/o la calidad de los servicios públicos.

Los estudios que periódicamente publica el Centro de Investigaciones Sociológicas (CIS) sobre “La opinión pública y la política fiscal” nos aportan información relevante. Así, en el estudio de julio de 2020 (nº 3290) se recoge la siguiente pregunta: “Algunas personas piensan que deberían mejorarse los servicios públicos y las prestaciones sociales, aunque haya que pagar más impuestos, (en una escala de 0 a 10, estas personas se situarían en la posición 0). Otras piensan que es más importante pagar menos impuestos, aunque eso signifique reducir los servicios públicos y prestaciones sociales, (se situarían en la posición 10 de la escala). Y hay otras que se sitúan en posiciones intermedias. ¿En qué lugar se situaría Ud.?”

Según el referido estudio, más de la mitad de las personas (52,2%) indican una puntuación igual o inferior a 5, lo que es indicativo de una considerable disposición a incurrir en mayores pagos a cambio de mejores servicios y prestaciones (sin entrar en mayores precisiones). Incluso hay un 21% de personas que se muestran partidarias de tales medidas de manera contundente (están en la posición 0).

Ahora bien, una cosa es declarar la actitud ante una subida de impuestos generales, concebida de manera indefinida, y otra, plantear el pago de cargas individualizadas (tasas y precios públicos, esencialmente) por el acceso a los servicios públicos (o al disfrute de prestaciones sociales). Existe una diferencia radical entre avalar un aumento de una carga tributaria desconectada del acceso a un servicio público, y de impacto generalizado entre los contribuyentes, y hacer lo propio respecto a un pago vinculado a dicho acceso y soportado directamente por el usuario.

Curiosamente, sin demasiado tiempo de desfase, diversos colectivos se han manifestado contra la iniciativa de la aplicación de peajes en las autovías[3].



[1] Vid. I. Lillo, “El Gobierno retoma el proyecto de cobrar para circular por las autovías”, Sur, 21 de abril de 2021.

[2] En las entradas de este blog “¿Un impuesto especial sobre las bicicletas?” (17-10-2017), y “Tráfico, congestión, contaminación y presupuesto: el experimento de Oregón” (17-12-2017) se abordan algunas cuestiones relacionadas.

[3] Vid. I. Lillo y H. Barbota, “Conductores, transportistas y la Junta rechazan el proyecto de cobrar para circular por las autovías”, Sur, 22 de abril de 2021. 


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