Era extraño que no se hubiera formulado la
existencia de un trilema específico sobre el cambio climático. El FMI, en su
publicación Fiscal Monitor de octubre
de 2023, se hace eco de una de sus manifestaciones. El trilema en cuestión
queda sintetizado en la representación gráfica. Los responsables de la política
económica se enfrentan a un trilema a la hora de tratar de alcanzar estos tres objetivos:
(1) objetivos climáticos, (2) sostenibilidad fiscal, y (3) factibilidad
política.
Así, si los gobiernos recurren preponderantemente
a medidas de gasto, este enfoque puede ser políticamente factible, pero la
deuda aumentará sustancialmente.
En cambio, si abordan las actuales
tendencias de las emisiones sólo con medidas moderadas, no podrán alcanzar los
objetivos climáticos.
Por último, si utilizan medidas basadas en
el precio de las emisiones, quedarían relajadas las exigencias fiscales, pero
surgiría el problema de la impopularidad social.
No obstante, el FMI considera que hay una alternativa
para alcanzar los tres objetivos de manera conjunta -lo que, de ser factible,
desactivaría el trilema-, a través de una combinación de políticas
cuidadosamente calibradas, adaptables a cada país. Dicho paquete comprende la
aplicación de un precio por las emisiones, junto con otras medidas para abordar
las preocupaciones distributivas y los impactos en el coste de la vida.