5 de diciembre de 2021

La adquisición de un automóvil: diferentes opciones

 

Una antigua alumna de la Facultad de Económicas de Málaga, con la que mantengo contactos esporádicos, me remite un correo, a fin de exponerme la operación que le plantea un concesionario de automóviles para la renovación del suyo. La operación en cuestión no resulta demasiado intuitiva, por lo que tratar de clarificarla o, al menos de tipificarla, es en sí un aliciente. Según me comentan, incluso algunas personas llegan a concertar este tipo de transacciones con una idea equivocada acerca de las obligaciones y los derechos inherentes.

En caso de lograr aportar alguna luz, podría incorporarse como un supuesto para un programa de educación financiera, o alguna acción formativa específica.

Los datos básicos (genéricos) son los siguientes: i) el precio del vehículo, al contado, asciende a X euros; ii) debe aportarse una entrada por importe del 35% de X; iii) de esta manera, queda una cantidad aplazada del 65%; iv) han de pagarse 35 cuotas mensuales de z euros.

Al cabo de los 3 años, el cliente tiene dos opciones: a) abonar el 65% de X, la parte aplazada, adquiriendo la plena propiedad del vehículo; b) entregar el coche, que tiene un valor asegurado por el mismo importe de la cantidad aplazada, y siempre que se haya hecho un máximo de 15.000 km por año.

En definitiva, del planteamiento anterior se desprende que la operación puede caracterizarse de la siguiente manera. De entrada, resulta difícil tipificarla, por cuanto nos encontramos con una mezcla de elementos. Esencialmente, se adquiere el derecho a utilizar el automóvil por un período de 3 años, a cambio de entregar al contado el 35% del coste, y de pagar un interés (sin amortizar el capital) por el 65% aplazado. Si se cumplen unas condiciones, el cliente tiene derecho a entregar el vehículo al cabo de los 3 años, cancelando la deuda contraída, o bien pasar a ser propietario aportando dicha cantidad aplazada.

Alternativamente, la persona interesada en el vehículo podría recurrir a un préstamo bancario para adquirir, desde el inicio, la propiedad del vehículo. Suponiendo que dispone del 35% del coste, tendría que pedir un préstamo por el 65% restante. La carga financiera mensual dependerá del plazo y del tipo de interés. A diferencia del caso anterior, iría amortizando parte del préstamo desde la primera cuota. Si, al cabo de los 3 años, quisiera desprenderse del vehículo, su valor dependerá, naturalmente, de la situación del mercado.

En el gráfico adjunto se muestra la comparación de las cuotas mensuales de las dos modalidades de préstamo, para un importe de cerca de 26.000 euros, con un tipo de interés nominal del 9% anual: dual (pago sólo de intereses durante los 3 primeros años, y de amortización e intereses durante los 7 años siguientes); unitario (pago de amortización de intereses durante los 10 años considerados).



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