10 de enero de 2019

Nuevas lecciones vitales de Lucy Kellaway

Lucy Kellaway ha sido durante muchos años, nada menos que treinta y uno, una de las columnistas señeras del diario Financial Times. Su columna semanal era una fuente de interesantes pensamientos sobre la gestión personal y empresarial. Matemática de formación, gran parte de su vida profesional está plasmada en multitud de artículos, centrados en el referido campo, ampliamente difundidos internacionalmente.

A mediados del año 2017, tras cumplir los 58 años de edad, decidió dar otro rumbo a su vida profesional, dejando su labor periodística como actividad principal para pasar a ejercer como profesora a tiempo parcial en centros de enseñanza secundaria londinenses. En dicho año puso en marcha un interesante proyecto docente orientado a dar apoyo a los estudiantes, en materias con formación deficitaria (matemáticas, ciencias y lenguaje). En dicho proyecto no lucrativo (Now Teach) el plantel del profesorado es bastante singular; está integrado por profesionales con amplia experiencia que están dispuestos a volcar sus conocimientos en ese loable objetivo. Antes de pasar a ejercer ese papel, los nuevos instructores han de realizar un curso de adaptación.

Cuando tuve noticia del proyecto no pude evitar buscar algunas connotaciones, aunque puedan ser distantes, con algunas de las iniciativas que, más modestamente, hemos tratado de impulsar en el ámbito de la educación económica y financiera. Igualmente, con otro proyecto con metas docentes más estructurales, hace mucho tiempo concebido y sucesivamente aplazado. También en nuestro entorno hemos constatado la disposición y la vocación de destacados profesionales para, bien al término de su carrera profesional o compatibilizándolo con ésta, aportar su caudal de conocimientos y experiencias a personas, jóvenes o menos jóvenes, que deseen ampliar su formación.

Dejemos la exposición de la idea, que espero pueda fructificar algún día, para otra ocasión. Mi intención aquí era simplemente hacerme eco de otro testimonio de Lucy Kellaway, que, aunque sólo de vez en cuando, sigue apareciendo en las páginas del Financial Times. La última vez que vi un artículo suyo fue a punto ya de clausurar el año pasado (28-12-2018).

En él, a pesar de las turbulencias y de la incertidumbre que marcan el inicio de 2019, y de otros detalles personales, se atreve a pronosticar que 2019 será para ella un gran año. La satisfacción que le genera su actividad como profesora de “teenagers” es una de las razones.

Este año, además, nos confiesa, no está decidida a renunciar al alcohol. Para contextualizar esta curiosa y desinhibida manifestación hace mención de un artículo escrito por Robin Dunbar, profesor de psicología evolutiva de la Universidad de Oxford, con un título muy expresivo (Financial Times, 10-8-2018): “Por qué la bebida es el secreto del éxito de la humanidad”. 

La condición social del ser humano está detrás de la tesis sostenida. Lucy Kellaway suscribe la argumentación pero se separa de este psicólogo cuando hace afirmaciones un tanto despectivas respecto de las personas que beben en solitario. Para ella, el consumo de alcohol (por supuesto, moderado) no la hace más agradable para sus amigos, sino para ella misma (“Al final de una larga jornada, invariablemente bebo a sorbos una copa de vino mientras cocino, leo o veo TV”).

Y finaliza su artículo con las siguientes reflexiones: “Uno no necesita ser un catedrático de psicología social para saber que los seres humanos responden a recompensas por el trabajo duro. Para mis estudiantes, la recompensa es obtener una alta calificación. Para mí la recompensa es mucho mejor – es una copa de vino”. La disponibilidad de alicientes personales, de uno u otro tipo, a la medida de las preferencias de cada cual, es una de las armas imprescindibles para mantener el pulso de nuestra marcha cotidiana. 

Entradas más vistas del Blog